SAAVEDRA Y LA VIGILIA DE ARTISTAS
Por Santiago Rodríguez,
periodista cubano radicado en Miami
Unos dicen que está irremediablemente loco. Para muchos es un operador frustrado de equipos pesados y, por supuesto, otros lo tienen como un héroe: su líder. Se llama Miguel Saavedra y es el jefe del grupo en el exilio “Vigilia Mambisa”.
Es un asiduo orquestador de espectáculos, junto a su equipo, frente a las puertas del conocido restaurante Versalles, de Miami, por cualquier razón que les resulte propicia para demandar “la libertad de Cuba”.
Aunque últimamente se han especializado en romper discos con una aplanadora o cilindro, pequeño, similar a aquellos gigantescos con que se asfaltaban las calles de Cuba (y aun hoy día se utilizan en tamaños menores, para la reparación de baches y huecos).
Esa labor de aplastar discos se realiza, con los de intérpretes u orquestas cubanas, del archipiélago, que anuncien su visita a Miami. Tal como ocurrió el pasado año, con el grupo los Van-Van y ahora recientemente con la visita del cantautor Pablo Milanés. En tanto ya se preparan para nuevos festivales del disco ripiado. Y amenazan hacerlo con cuanto conjunto musical o cantante individual se presente aquí; incluso el show comienza antes de que se levanten las cortinas del escenario; o sea, en cuanto se deé a conocer la noticia por los medios locales o los oficiales de Cuba.
Al final La Vigilia…, termina con menos integrantes a la hora del espectáculo, que cuando comenzaron la primera función teatral en la calle.
En lo personal, me molesta. Primero porque es una burla a nuestros mambises del siglo XIX. Vigilantes si fueron esos intransigentes, con los invasores, contra la colonia española, antes de ser entregada Cuba a los Estados Unidos.
Y segundo, creo que el mejor ejemplo de ello, de vigilante, valiente frente al enemigo fue el Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz. Con un puñado de hombres rescato al brigadier Julio Sanguily, que, herido, era conducido prisionero por un escuadrón de rifleros de 120 hombres. Solo le bastó su “yaguarama” y el de sus hombres, para arrebatarle a Sanguily al enemigo. A punta de machete.
Y si algo me molesta de la mal llamada Vigilia Mambisa, es el hecho de que mi propio abuelo ostentaba los grados de capitán del glorioso ejercito libertador. Y lo otro, el saber desde niño contra que cosas valía la pena combatir. De ahí que pienso que a la Vigilia le queda grande lo de Mambisa, en cambio lo que le viene como anillo al dedo, dado a lo que se dedican es el titulo de “Vigilia de Artistas”.
4 comentarios
Carlos -
De eso se trata la libertad, de tener y buscar alternativas. Si usted viviera en Pogoloti, Santa Crus, Regla o Guanabacoa o cualquier otro barrio peligroso de la Habana, le costaria un congo poderse mudar para Miramar o el Vedado.
Leonardo Moncada -
Machito Villalobo. -
Carlos -