ERNESTO CARDENAL OPINA
Entrevista publicada en México
Campeche, Cam., 23 de diciembre, 2007. El capitalismo, el neoliberalismo y la globalización de la economía sólo generan pobreza y ponen en peligro la vida en el planeta; para salvarlo hay que cambiar los sistemas político y económico, porque de otra manera nos encaminamos al suicidio planetario, advirtió el poeta y sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal.
En amplia entrevista con La Jornada, un día después de la presentación, ante decenas de jóvenes, de una antología poética en el contexto del Festival Cultural del Centro Histórico de la ciudad de San Francisco de Campeche, el también ex guerrillero y ex monje trapense, autor de más de 200 obras que han sido traducidas a unos 30 idiomas, reiteró su esperanza en los jóvenes —“la nueva generación que produce la evolución humana”— para cambiar este estado de cosas.
Religioso impulsor, en su momento, de la teología de la liberación, Ernesto Cardenal Martínez, nacido en Granada, Nicaragua, en 1925 (el 20 de enero cumplirá 82 años), reitera su idea de una “Iglesia revolucionaria” que defienda a los pobres y a los oprimidos (“La única lucha válida es la lucha por los pobres y los oprimidos”, señala) y externa su solidaridad con el movimiento zapatista y la otra campaña, a la cual considera “lo más impactante que tiene ahora México”.
También anunció que trabaja en una obra que recopilará la vida del misionero español Vasco de Quiroga (1470-1565), conocido como Tata Vasco (“Tata es igual a papá y así le decían los indios a Dios”, acota), quien conquistó los corazones de los indígenas de Michoacán y demostró que en los hechos es posible la utopía de Tomás Moro.
De pantalón de mezclilla, sencilla camisa blanca, sandalias negras y su infaltable boina negra, el poeta nicaragüense evita abundar en los problemas concretos de México.
“Yo no escucho mucho de México ni de ninguna cosa en el extranjero, porque hay desinformación con respecto a México, con respecto a Nicaragua y con respecto a todo, y con respecto a las revoluciones, más todavía.
“Tiene uno que informarse de otra manera. Yo me he informado en forma personal en México porque he venido a México y he conversado. La vez pasada estuve en Hermosillo, donde tuve el honor de que me visitara el subcomandante Marcos y clausurara un encuentro internacional que teníamos en Sonora. Tengo gran admiración por Marcos y me parece que lo más impactante que tiene ahora México es la otra campaña.”
¿Y por qué considera impactante la otra campaña?
—Es muy original desde su nacimiento, en el siglo pasado, como la última revolución del siglo XX y la primera del XXI, una revolución además, pacífica, lo que parece una paradoja. Con pocas armas, y algunas eran de palo, y que se desarmó como a los 15 días más o menos. Yo escribí entonces, a los pocos días del asalto a San Cristóbal de las Casas —defendiendo la acción de Marcos, porque la había atacado Daniel Ortega diciendo que no estaba de acuerdo con el método de lucha armada, que estaba de acuerdo con las metas—, entonces yo escribí rebatiéndolo con algo que se publicó en La Jornada, y el subcomandante, hace un mes, me dijo que había leído lo que yo escribí.
“El argumento de Ortega es que ya no era época para luchas armadas, y yo dije que me extrañaba de alguien que había llegado al poder, junto con otros, en la primera revolución de Nicaragua, por las armas.
“Y cité al Papa Paulo VI, que había dicho que era lícita la revolución armada cuando se trataba de una tiranía evidente y prolongada, y yo dije que si había un caso como éste era el de los zapatistas, porque los indios de Chiapas sufrían una tiranía sumamente evidente y tan prolongada que era de 500 años, y que por tanto estaba justificada la lucha armada del subcomandante Marcos.
“Era una originalidad de él (Marcos) porque no ha sido sangrienta y porque además ha sido con humor; creo que es el único político el mundo que es humorista y que es poeta también, además de otra cosa.
“Vemos que se ha abierto ahora a todos los pueblos; ya no son sólo los mayas, sino todos los indios no sólo de México, sino de América, y no sólo los indios, sino los blancos, los negros y todo mundo, todos los oprimidos, por decirlo así, o los grupos minoritarios; hasta los homosexuales, las monjas y todos.”
Entonces, ¿es válida esta lucha, es válido este método?
—Es la única válida. La única lucha válida es la lucha por los pobres y los oprimidos; oprimidos de toda clases como es la revolución de Jesús, que eran los pobres, los enfermos, los niños, que entonces eran también oprimidos, y las mujeres que han estado oprimidas, y los pecadores que abarcaban a todos, menos a los ricos, a los poderosos, a los orgullosos, a los engreídos.
¿Los partidos políticos no pueden encauzar esta lucha?
—No, el pueblo ya no cree en los partidos políticos; está descorazonado, decepcionado de los partidos, de los líderes y de las ideologías; entonces hay que buscar otra cosa. Esas reuniones multitudinarias de los jóvenes en las grandes ciudades, de miles y miles con el clamor de ‘otro mundo es posible’, es una nueva revolución que está habiendo ahora, electrónica principalmente, porque se reúnen a la velocidad de la electrónica.
¿Existe en los jóvenes este ánimo, el idealismo, el pensar en los demás?
—Como nunca. Yo me pongo a pensar cómo era la juventud como la mía, no teníamos preocupaciones de ninguna clase. En Nicaragua, pues a lo mejor cambiar a Somoza, pero ninguna otra, ni siquiera cambiar de sistema político y económico. Los jóvenes teníamos sentimientos egoístas.
“Además de las monstruosidades, que cada vez son más grandes, pero al mismo tiempo la solidaridad es más grande; además de toda la destrucción del planeta, también hay preocupación ecológica en el mundo entero cada vez mayor, y ésa es la esperanza de todos.
“La esperanza son los jóvenes, la nueva generación que produce la evolución humana, que es parte de la evolución del planeta y del universo. Hacia algo vamos.
La comunidad ideal que usted pensó, ¿aún es posible?
—La única sociedad posible es el socialismo. No hay más que capitalismo y socialismo. El capitalismo es el egoísmo, lo cual es antihumano, y el socialismo es lo comunitario y lo solidario, lo cual es realmente humano porque la naturaleza humana es esencialmente solidaria. Es por cooperación que nosotros hemos llegado a ser humanos; la cooperación es la que nos hizo humanos, la que nos seguirá haciendo humanos o nos va a deshumanizar si seguimos con el capitalismo desenfrenado que hay.
La Iglesia parece que ha abandonado estos ideales…
— ¿Cuál Iglesia? ¡La Iglesia es el pueblo de Dios! ¡La Iglesia no es la jerarquía, la jerarquía es otra cosa! El papa Pío XII, que era conservador, mejor dicho reaccionario, sin embargo dijo que la Iglesia eran los seglares y que la jerarquía era para servir a los seglares. Sobre este punto, Ernesto Cardenal adelanta que trabaja en la vida del obispo michoacano Vasco de Quiroga, uno de los pocos que han demostrado que es posible una sociedad ideal.
“Ni Tomás Moro pensó nunca que podría realizarse, ni Platón pensó tampoco que su República podía realizarse y entonces este originalísimo Vasco de Quiroga pensó que ese sistema era para el Nuevo Mundo. Su obra duró 200 años y ahí todavía los indios en México lo recuerdan con el nombre de Tata Vasco; tata significa papá, que también es el título que se le daba a Dios.” (Tomado de La Ventana)
38 comentarios
Gabriel -
Obviamente me he confundido
Perico -
Carlos -
Gabriel -
"49 años de derrotadas, ansiedades fustradas, maletas desechas y frustración" no convierten a dos millones de cubanos en peores personas, ni les privan de un ápice de los derechos que tienen, para empezar como seres humanos, y para acabar como cubanos.
Te puedo garantizar que cuando Cuba sea libre esos cubanos no van a fusi lar a nadie ni te molestarán para nada. Porque la enorme grandeza de la Demo cracia y la Libertad consiste en que no se venga de sus ene migos, sino que los acoge dándoles los mismos derechos que a todos.
En Europa del Este cuando llegó la libertad, los dirigentes comunistas pasaron a controlar las empresas recién privatizadas; y ahora Gorvachov se está enriqueciendo dando conferencias a 100.000 dólares por hora.
El fin del Comunismo beneficia a los comunistas como a nadie, y, tú, Carlos, vivirás mucho mejor en la Cuba libre del futuro.
Un saludo
Gabriel -
No voy a hablar de Chávez, porque no tiene mucho que ver con Cuba.
Además, para conocerlo mejor sólo basta con oirle. Aunque, últimamente he decidido dejar de oirle porque me aburre.
Creo que el último referendum ha supuesto un punto de inflexión del que no se recuperará; aunque seguirá dando la lata durante un tiempo.
Un saludo
Fabian Pacheco Casanova -
Carlos -
Cino -
Alguna vez, en los descocados y liber tarios años 60, el compositor y cantante Armando Manzanero aprendió además de a ver la luz del otro lado de la luna, que la semana tiene más de siete días. Ah, Manzanero; los cubanos estamos en un año que tiene más de doce meses. Ya dura 17, justo el tiempo que lleva Fid el Cas tro ale jado del po der.
Entre expectativas, prom esas y reflex iones del Coma ndante en Je fe, han pasado dos primeros de enero, pero seguimos dete nidos en el verano de del año 2006 esperando a que pase algo.
En esa larga espera por si el Coma ndante vuelve o no, nos prome tieron leche, agua y un mon tón de estrellas. Nos hablaron de cam biar todo lo que fuera necesario cam biar. Librar nos de tra bas y prohi biciones ab surdas. Re inventar el social ismo y la demo cracia.
Nos invitaron a hablar sin tem or. A acudir en masa a las asam bleas de lamenta ciones. Se encen dieron millones de bombillos ro jos que indican la nece sidad de cam bios.
Lo cre ímos todo. Que íbamos a ver la leche correr y el agua también. Que se abrían espacios para el debate. Los medios ofi ciales se alejarían del triun falismo. Anunciaron el advenimiento de la demo cracia social ista. Por tanto, era posible, luego de diez años, el VI Congreso del Partido Comu nista.
Pareció que los jefes comu nistas eran capaces de evolucionar. Entonces se abrirían las cár celes y se respe tarían, ahora sí, los dere chos hum anos.
Los intelectuales y artistas se creyeron (¡vanos que son!) que eran ellos, con sus ciber tormentas, los que levantaban el techo de las prohi biciones.
Los agricultores, enterados de que la propiedad en el social ismo no tenía necesariamente que ser está tica, se creyeron que la tierra sería para los que la viven y la trabajan.
A todos se nos hizo la boca agua con la idea de vivir una sociedad donde funcionen la economía y los servicios, y donde los trabajadores puedan vivir de sus sala rios.
Lo creímos todo o nos hicimos los que lo creíamos. Nos cuesta demasiado crear. Los seres humanos necesitamos creer en algo. En cualquier cosa. ¡Es tanta la deses peranza!
No es difícil, luego de tantas décadas de simu lación y do ble mo ral, fin gir que creemos.
Hay que admitirlo. Ellos nos advirtieron que no eran magos, que no esperáramos soluciones espectaculares.
Los pro blemas, que son muchos y de todo tipo, se van a res olver, dicen, con lo que tenemos: con casi nada. Hay que tener mucha pa ciencia.
Seguimos dete nidos en una foto amarillenta, empolvada y con telarañas. La tomaron dos veranos atrás. 2007 se acabó y apenas nos enteramos. No hubo que celebrar. Tampoco hubo con qué. Sólo bombillos ro jos, más desa parecidos en el mar y artistas que esca paron.
No hay vida nueva, porque el año no trajo nada nuevo. Ni bueno. Seguimos en el mismo año. Un año con más de doce meses. Creye ndo cosas. O lo que es peor, fing iendo que las creemos. A ver qué pasa.
Fabian Pacheco Casanova -
Carlos -
Enrique R. Martínez Díaz -
Carlos -
Chávez insistió que para instaurar el socialismo en el país es necesario "un mayor esfuerzo" de sus simpatizantes que "permita consolidar nuestra fuerza para continuar avanzando hacia el Socialismo del Siglo XXI".
Me puede explicar alguien para que se hizo un referendo. Acaso no le dijo su pueblo que no queria Socialismo?
Fabian Pacheco Casanova -
Gualterio Nunez Estrada -
Fabian Pacheco Casanova -
Fabian Pacheco Casanova -
Yor -
Carlos -
Fabian Pacheco Casanova -
Gualterio Nunez Estrada -
Carlos -
P.S. Es realmente incomodo romper la cen sura. tienes que dividir tantas palabras!
Bueno al menos divididas las podemos publicar, hay gente en peores condiciones de falta de libe tad.
Anonimo -
Gualterio Nunez Estrada -
Enrique R. Martínez Díaz -
Nosotros no pensamos que el gobierno de Cuba "atacó" a Bolivia; un gran revolucionario, HOMBRE, nacido en Argentina y ferviente convencido de que, al igual que en épocas anteriores, los patriotas latinoamericanos habían combatido en diferentes partes de Nuestra América, era posible y correcto tratar de liberar a Bolivia de un gobierno castrense y a partir de allí extender la Revolución al resto del continente; en la Guerrila había cubanos, peruanos,y mayormente bolivianos; el mejor ejemplo de que no se les tildó de asesinos, es el que hoy en Bolivia la mayor parte del pueblo los vé como héroes, no importa la sucia propaganda que las élites y las Agencias de Desinformación Masiva del Imperialismo les trataron de inculcar durante cerca de 40 años. Yo no dudo que en la España del siglo XIX Francisco Javier Mina haya sido visto como alguien negativo, y se consideren como fieles a su país personas como el Conde de Valmaseda, Lersundi, Boves, y el peor de todos, Valeriano Weyler. La verdad no siempre es conveniente.
Gabriel -
Ahora le tocó a la palabra "fusil amiento,"
Parece que esta palabra está cen surada cuando se asocia a la fecha del triunfo de la Revolución, cuyo número no puedo poner.
La cen sura ha podido conmigo.
Gabriel -
Por poner un sólo ejemplo, el gobierno cubano atacó a Bolivia mantando a innumerables bolivianos, cuando Bolivia no era ni de lejos ninguna amenaza militar para Cuba, en una acción de armas que no estuvo respaldada ni siquiera por el Partido Comunista Boliviano.
Fué un ataque gratuito y sin ninguna provocación previa por parte de Bolivia. Una nación que, insisto, no suponia ningún tipo de amenaza para Cuba.
Ya sé que me dirás que se hizo para defender a los bolivianos. Pero ¿no sería mejor dejar que los bolivianos resoviesen sus problemas sin la ayuda de nadie?
Esa operación fué la invasión de Playa Girón a la inversa.
Mejor dicho, no fue ni eso, ya que en Playa Girón eran cubanos los invasores, mientras que en la guerrilla del gobierno cubano en Bolivia el mando y el grueso de la tropa eran cubanos.
Enrique R. Martínez Díaz -
Fabian Pacheco Casanova -
Gabriel -
Hay que repetirlo mil veces: a la hora de determinar a quién hay que matar para defender a los más débiles hay una diversidad asombrosa de opiniones.
Por poner un ejemplo, yo he conocido a muchos cubanos que opinan, contra mi propia opinión, que sería conveniente matar a Fidel. Sólo es un ejemplo. Fidel no me interesa. Perfiero hablar del futuro de Cuba.
Habrá quien es partidario de matar a Bush, a Blair, a Aznar, al Papa, e incluso a Carlos Otero y a Papá Noel. Y con eso quedarán convecidos de que ayudan a los más débiles.
Pero no olvidemos que eso son sólo opiniones.
Estamos planteando "matar" basándonos en una opinión.
Con ello cometemos un ejercicio mortal e imperdonable de so berbia, porque le damos a nuestra opinión más valor que a la vida ajena.
La vida, sea de quién sea, es mil veces más valiosa que nuestra opinión.
Con ello no rechazo el empleo de la violencia para defender la vida frente a un ataque seguro e inminente. Si alguién está a punto de matar a tu familia y no hay más remedio, sí se puede actuar con la violencia mínima para evitarlo.
Lo que no admito es el principio de que se puede matar para defender una opinión.
Un saludo
chucho -
Gualterio Nunez Estrada -
Gualterio Nunez Estrada -
Gualterio Nunez Estrada -
Enrique R. Martínez Díaz -
Fabian Pacxheco Casanova -
Gualterio Nunez Estrada -
Fabian Pacheco Casanova -
Gabriel -
La pregunta clave es: ¿Puede la violencia llegar a ser legítima, si se emplea para defender a los más oprimidos?
Aunque creo que en realidad estamos empleando la palabra "violencia" como una versión edulcorada de otra palabra mucho más fuerte: "matar."
¿Es lícito matar para defender a los más oprimidos?
El primer problema consiste en determinar a quién tenemos que matar para defender a los oprimidos. En este tema hay una diversidad abrumadora de opiniones.
He conocido a muchos cubanos que me decían con total convencimiento que es conveniente matar a Fidel para aliviar el sufrimiento de muchos cubanos, a lo cual yo siempre me opuse rotundamente.
Supongamos que llegamos tan lejos como para buscar la muerte de Fidel. A continuación nos enfrentamos con un problema práctico de enorme magnitud: ¿cómo garantizamos la muerte exclusiva de Fidel?
Supongamos que ponemos una bomba y podemos matar a Fidel, pero resulta que está acompañado de Raúl y de Lage. Entonces matamos a los tres y no pasa nada.
¿Y si está acompañado de diez miembros del partido comunista? -Seguimos matándolos a todos.
¿Y si son mil miembros del partido comunista? -también los matamos a todos.
¿Y si no queda más remedio que matar a un millón de cubanos seguidores de Fidel?¿También los matamos a todos?
¿Dónde ponemos el límite?
¿Y si Fidel está acompañado de su esposa? ¿Debemos matar a ambos, aunque la esposa sea inocente?
¿Y si Fidel está acompañado de tres de sus nietos pequeños, que son inocentes absolutamente de todo? ¿También los matamos?
Ernesto Cardenal no nos ha aclarado a cuanta gente es lícito matar para defender a los oprimidos.
Tampoco nos ha aclarado a cuantos inocentes es lícito matar.
Probablemente nos dirá que no es lícito matar ni a un sólo inocente.
Y, en ese momento estoy al cien por cien de acuerdo con él.
Entonces viene la siguiente pregunta clave:
En la vorágine y el desorden de la lucha armada ¿Cómo hacemos para garantizar que no mataremos a ningún inocente?