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PATRIA Y HUMANIDAD

NO SE PONCHE, CÉSAR VALDÉS

NO SE PONCHE,  CÉSAR VALDÉS

Luis Sexto

¿Será cierto? El sitio Cubadebate ha informado que César Valdés, uno de los oficiales mejor calificados en el béisbol cubano,  se retira del terreno. No vestirá más de negro. El luto lo llevará en el alma. Está dolido. Porque -ha dicho-  aficionados y periodistas han culpado a los árbitros de haber estropeado la última etapa del  campeonato nacional.

La renuncia, según Valdés,  es irrevocable. En particular, le temo a los adjetivos  inapelables. La experiencia me ha enseñado que nada  humano puede darse por definitivo, salvo la muerte. La sabiduría popular  lo ilustra con esta máxima: nunca  digas que de esta agua no beberás. Recientemente,  tuve que rectificar cuando cerré, “irrevocablemente”,  la opción de comentar mis post. Y luego, tras pensarlo, y consultarlo en un aparte durante la discusión de una tesis universitaria sobre la blogosfera, mis colegas del tribunal me recomendaron abrir.  Abre tu blog a los comentarios; no importa que entren los zafios, los peseteros, los tontuelos que disfrutan con insultar o estorbar.  Abre para que los internautas inteligentes y bienintencionados  enriquezcan tus textos. Y abrí…

Ahora bien,  qué más puede uno intuir, aparte de su ofendida dignidad, en el retiro de este hombrón, ancho como una muralla y que suele ser certero como un misil cuando canta out o safe. Los árbitros habitualmente han soportado injurias del público y protestas de los jugadores. Pero comprendo que en el presente ya es intolerable la agresividad verbal e incluso física.  Peloteros y directores olvidan que las jugadas de apreciación son inapelables, y aquí el absoluto si cabe en propiedad. Imaginemos que un árbitro canta: ¡estrai!,  y luego, a una reclamación, rectifica y grita: ¡bola! A dónde irá  el béisbol, sin orden, sin disciplina, sin autoridad.

Lo dije en otro texto, publicado en mi blog: la crisis del béisbol es la misma que la del país. La pelota cubana sufre una crisis de autoridad, una crisis de valores y una crisis técnica. Pero hablar de crisis no significa hablar de decadencia. Crisis no significa ruina. En su etimología griega quiere decir que quien está en crisis está sometido a juicio, a prueba. Y el juicio y la prueba dan la oportunidad de superar el momento crucial. Si no puedes pasar el examen, te desmoronas.

Nada desconocido revelaré. Pero, como el campesino azuza el trabajo  repitiendo el  nombre de sus  bueyes mientras aran,  es preciso  vocear que un número estimable del público ha rebajado el respeto por el juego. El fanatismo ha usurpado el aire de la pasión sana ante un partido de béisbol. Digamos que se ha desviado hacia un fanatismo soez.  Y  me atrevo a preguntar: ¿acaso las apuestas ilícitas no estarán  calentando la grosería y la violencia en  las gradas, incluso fuera de ellas?

En el terreno, la vergüenza y el honor deportivo en ciertos jugadores han empalidecido;  se han quedado como en ropa interior.  Y parece que los mentores, unos o todos, han perdido metodología y facultades para alzar como causa, más que la vitoria, el triunfo del juego limpio y entero. El deporte es un drama, un drama que estimula la catarsis hacia la transformación denodada, capaz de besar la arcilla o la hierba por una tarde o una noche de gloria.  Si yo fuera pelotero, me preguntaría cada vez que corriera, guante en mano, hacia el campo corto, puesto de mi adolescencia soñadora: ¿Estaré dispuesto a no figurar en los elencos y estadísticas, a renunciar a que mi nombre sea mencionado y consultado dentro de un siglo por quienes seguirán creyendo  en  las hazañas del pasado?

Los árbitros, sabemos, se equivocan. Estos hombres vestidos de negro, como se titula un reciente libro de José Antonio Fulgueiras, sufren cuando yerran, y a veces no quieren errar. El propio  periodista villaclareño  cuenta en sus entrevistas que uno de ellos le confesó: la jugada era quieto; debí abrir los brazos y  sin embargo levanté el pulgar. Qué me pasó.  No lo sé. ¿El relámpago de la velocidad me habrá dictado la orden contraria? Sólo sé que esa noche no comí ni dormí.

César, César Valdés, escuche. Soy periodista. Comprendo que algunos de nosotros no sabemos que el equilibrio es la mejor evidencia de nuestra capacidad técnica para juzgar y expresarnos.  Nos falta equilibrio; nos falta cultura; nos falta sensatez. A mí me faltan esas cualidades que establecen la diferencia entre el profesional y el aventurero.  Pero escúcheme: ¿A pesar de su experiencia, persistirá en su decisión? ¿Creerá usted que un hombre útil y honrado puede apartarse irrevocablemente  de sus deberes cuando sabe que otros hombres necesitan de él?  

Que renuncien los ineptos, los aprovechados, los de la vista gorda; que renuncien  los copilotos de Julio Verne, que dan la vuelta al mundo sin ningún objeto creador, salvo el de vestir elegantemente; que renuncien los que se mojan el dedo índice y lo exponen al viento  para  decidir qué responden o qué dicen o qué ocultan. Esos pueden y deben dimitir.  Pero qué será de nuestro país si los mejores renuncian.

12 comentarios

julian -

podras borrar mis comentarios, no importa, los volveré a poner una y otra vez.
los que deben jubilarse de una vez son los corruptos

El Duende -

Crisis en el beisbol

COMENTARIOS DEL AUTOR Y ENTREVISTA A YORDANIS SAMÒN
(Copiado de Zona de strike)
Siempre pensé –y lo seguiré pensando- que la Liga Mexicana de Béisbol iba a ser un escenario apropiado para que Yordanis Samón Matamoros impusiera su recio bateo. Creí, incluso, que le podría ser más fácil insertarse en ese entorno que al mismísimo Alfredo Despaigne Rodríguez. Sin embargo me equivoqué; ni lo uno ni lo otro. El Bombardero de El Dorado regresó a casa con una enorme insatisfacción después de ser cesado por Los Piratas de Campeche por bajo rendimiento.
Realmente Samón apenas tuvo tiempo para tomarle el pulso al pitcheo rival (¿acaso 18 veces al bate prueban la valía de un pelotero?). Pero, el club estaba urgido de ofensiva y en un desorbitado intento por acceder a la pos temporada –fallido a la postre- cambió al cubano por el norteño Matt Young. Así es el béisbol profesional, eso también lo debe aprender el criollo.

Más allá de las urgencias de los filibusteros, tengo la percepción de que a Samón le jugó una mala pasada su extremo apego a la Patria, a sus costumbres. “La diferencia es grande. Aquí estamos habituados a que alguien nos vaya guiando en lo que debemos hacer. Todo está organizado en el día, allí cada quien tiene que planificarse bien, para comer, entrenar, y al final del partido regresar a un hotel por tus medios.

“Tienes que ordenar la vida como un nativo y se hace difícil; tienes que buscarte un espacio para entrenar, que casi nunca lo hay porque por la mañana no se puede o no tienes un técnico con quien ir al estadio y hay que aprovechar después que termina un juego a las 10 de la noche para hacer algo cada uno por su cuenta”, dice mientras sus palabras se tornan tenaces.

“Yo estaba en el juego y estaba pensando dónde íbamos a comer al terminarse el partido. Nada igual que aquí que tienes un bufé, una guagua que te lleva al estadio y te trae para los juegos, incluso si quieres ir a entrenar”.

Caer de “fly” en medio de un entorno desconocido tiene su precio, cobrado de manera excesiva porque a priori se desconocía el destino, las intenciones o sencillamente lo elemental para estar preparado psicológicamente.

“Nos fuimos de aquí de la provincia (él y Despaigne) sin saber para dónde íbamos. Nos dijeron que era para La Habana a una reunión, nadie nos habló de que sería para ir a jugar a México. Cuando nos dieron la noticia lo primero que planteamos fue que llevábamos, aproximadamente un mes sin entrenar, sin estar activo.

“Pensábamos que podríamos tener un tiempo de adaptación al llegar a equipo; el béisbol de allí no está a un nivel como el de aquí, pero si hay que prepararse para jugar. Nosotros habíamos terminado la Serie Nacional y estábamos aquí sin hacer nada. Además, siempre acostumbramos a tener 15 o 20 días de preparación cuando hacemos la preselección o equipo, luego salimos. Realmente ahora no estábamos preparados.

“La experiencia es extraordinaria, fuimos los primeros y aprendimos bastante. En lo adelante lo que hay es que perfeccionarla, ir con tiempo para adaptarse. Pero es una buena idea del país”.

A parte de este preámbulo ¿cómo vivió Samón entre Los Piratas?

Las relaciones son muy diferentes que las que uno tiene de las series nacionales. Uno está en su taquilla para esperar el juego, solo salen al terreno a calentar los nueve que van a jugar, algo que nos incomodó un poco porque estamos acostumbrados a que antes de empezar un partido todo el mundo esté en función de eso. Pero allí no, cada cual hace su trabajo. No hay análisis de nada, no hay meeting.

Llegas al estadio sobre las 4:30; ahí te pones la ropa de entrenar y te dicen vamos a dar 20 batazos… te los dosifican pero ya, de ahí para adelante tú no sabes cuándo vas a hacer una resistencia, cuando hacer pesa, tramos… Si quieres hacer algo eso es por tu cuenta, pero es muy difícil porque vas a jugar a las 7:00, las 8:00, ¿y vas a correr 20 minutos?

No hay preparación física planificada ni un técnico que la dosifique, como se lleva aquí. En todo este tiempo un día hicimos pesas y otro dimos cuatro tramos de carrera, porque nosotros quisimos.

¿Fue realmente este cambio brusco el que condicionó el bajo rendimiento? Todos pensamos que ibas a “descoser” la pelota y no fue así.

Hay muchos factores, pero el bajo rendimiento lo atribuyo, fundamentalmente, a no tener una buena preparación, a llegar a un equipo que está en apuros, que aspira a la clasificación, y no tener muchas oportunidades al bate; además tuve que jugar en los jardines, que para mí es una preocupación adicional, y por encima de eso hacerlo de noche, que ya no es habitual en Cuba.

Sin embargo con Isla de la Juventud jugaste en los jardines y no mermaron tus estadísticas…

Sí, pero tenía un gran director (Armando Johnson), que al llegar a la Isla, en el mes y medio de preparación, conversaba a diario conmigo y me decía que lo que pasara allá atrás no había problemas, pero aquí en Campeche era diferente porque se estaba jugando todos los días un desafío que le hacía falta al equipo y si no lo hacías bien no podías seguir. Teníamos una gran responsabilidad. Era como que te dijeran “de tú actuación depende la clasificación del equipo, no puedes fallar”.

¿Influyó en algo la gran cantidad de trabajo acumulado desde la preparación para el III Clásico y luego la temporada?

No, no influyó mucho. Pienso que si nos hubieran llamado terminando la Serie Nacional el rendimiento hubiera sido distinto, o si hubiera ido unos 15 días antes para insertarme en el equipo.

¿Realmente la incursión en esta Liga puede ayudar en algo al béisbol cubano?

Creo que sí. Enfrentarse a otro tipo de pitcheo a otro campeonato puede elevar nuestro nivel; aunque también se puede ir a otros países (Japón, Corea, Taipéi de China).

A propósito del pitcheo ¿cuán difícil es?

Es un pitcheo muy inteligente, se basa en muchos rompimientos, en cambios de bolas, sliders, curvas, que aquí no los hay con mucha frecuencia. Además, hay serpentineros de República Dominicana, Venezuela, México que tienen mucha calidad, experiencia y diferentes estilos. Los zurdos abridores tiran mucho cambio de bolas y screwball, y cuando te tiran una recta casi siempre es para cerrarte. De manera general el pitcheo es mejor que el nuestro en el sentido del control y de localizar los lanzamientos.

¿Pero en Cuba le das palo a cualquiera?

Aquí uno se prepara más. Viene a lanzar fulano de tal y tú dices, recta, recta y quizás un slider o una curvita… y te preparas para eso. Además, uno conoce más o menos cómo pide el cátcher.

Por ejemplo, Freddy Asiel, que es uno de los lanzadores más difíciles, conmigo preferentemente cuando tiene corredores en bases me va a tirar por el lado del brazo un sinker, no me va a tirar una curva que se queda ahí o una recta afuera que yo la pueda batear fácil para el derecho… Otro, Yoelkis Cruz, si se mete por al lado me tira sinker pero cuando se queda tres cuarto o me tira tenedor o me tira slaider… El caso de Odrisamer, cuando él para el guante tira recta o cambio, cuando lo acuesta tira slider…

Así más o menos vas conociendo los lanzadores y por muy buenos que sean le bateas con cierta comodidad.

¿Eso quiere decir –entre otras cosas- que bateas avisado?

Te los encuentras tantas veces que ya los conoces. Allá no. De momento te pitchea un dominicano que tu jamás has visto, incluso ni los de allí porque puede que haya llegado nuevo; yo debuté frente a un cerrador que tiraba rectas de más de 90 millas y cambios con un gran contraste.

¿Entonces tu mecánica de bateo se sustenta principalmente en el estudio del rival?

La mecánica de bateo de uno se sustenta en pensar que la mayoría va a venir con rectas, porque si hay cinco pitcher en Cuba que tiran un cambio de bola son muchos. Aquí todos los pitchers te tiran una recta o tiran un sliders.

¡Ah!, lo que vi allí. Los chamaquitos esos ya tienen 16 años y en la academia que están profundizan en el control –tienen gran control- y en tirar de todo, aquí casi siempre te dicen estas muy nuevo para estar tirando un cambio u otros envíos difíciles, entonces te tiran rectas y sliders, allí no, allí te están tirando de todo desde los 16 años.

Tú carta de presentación siempre ha sido la recia ofensiva, sin embargo nunca has podido hacer un equipo Cuba a un torneo elite, ¿después de esta incursión en México todavía tienes esperanzas de vestir la franela de las cuatro letras?

Difícil, lo vi ahora para el Tercer Clásico. Cuando hicieron la preselección estaba bateando 313, no se me olvida, y no me convocaron. Todo parece indicar que él tenía intenciones de llevar a Malleta (fue el que llevó a la gira por Asia) y no estaba bateando, entonces trajo a Luis Felipe Rivera que no había hecho la preparación previa, aunque en ese momento promediaba por los 340.

¿Quién es él?

Víctor Mesa, el jefe de la pelota aquí.

¿No será que estás prejuiciado con él?

En la preselección antes de ir al tope en México al tipo no le gustaba que yo bateara. Cuando terminaban los partidos a los pitcher que yo le bateaba le metía recital, ¡pero duro! Los mismos chamacos me decían ´oiga compadre el tipo no te quiere porque en vez de ponerse contento porque estas bateando mira lo que hace´.

“Recuerdo que en un partido por la noche di tres hits. A Lahera le di hit y empate el juego, luego a Alexánder en el noveno le abrí con sencillo… y el tipo decía vayan a ver sáquenle out a ese guajiro que anda suelto aquí.

“Al otro día ante el juego me dice Samón pasa palante, mira hoy tuvimos una reunión y tú haces en la preselección el número 51. Eso fue delante de todos. (porque él se lo ha gana´o, porque ha cambia´o su forma, ya se ríe, se lleva mejor con los demás) y todo el mundo cuando termina eso me dice ´viste ese tipo como tú has bateado aquí y has acabado mira lo que viene a meter´.

“Después dijo ´la preselección del Clásico se iba a hacer de 50 pero como tú has rendido aquí te incluimos, haces el 51´, tipo chantaje. En el otro juego que echamos por la televisión dije: deja que tiren para acá lo que les dé la gana si ya con eso el tipo me habló claro, yo no voy al equipo Cuba.

Pero fuiste a México…

Sí, jugamos dos juegos, di hit, jonrón, y ya no jugué más. Al llegar al aeropuerto mandaron a Jorge Fuentes y cuando estaba esperando que salieran las maletas me dijo ´te quedas en tu provincia que ya no vas a seguir más con nosotros´.

El mensaje había sido claro. Si estas en un lugar donde está Pito Abreu y Malleta y estas bateado, rolling para allá, línea para acá, tienes aspiración de algo; pero cuando estas próximo a una gira importante el tipo te dice que haces el 51, eso quiere decir que en 25 yo no entro.

¿Algún problema personal?

A él lo que le cae mal es que desde el año pasado cuando yo estuve en la preselección batee bien para estar en el equipo. Además, en las series nacionales –tanto cuando dirigía a Villa Clara como ahora con Matanzas- siempre le caigo a palos, como él es quien lleva el pitcheo no soporta eso. Siempre pasa así. Este año fui a Matanzas con Granma y le di dos jonrones, tubey… y con la Isla lo acribillé… ¡ni hablar de eso!

Sin embargo, hubo un incidente desagradable entre ustedes en la pasada temporada…

Sí, eso fue después de las giras y antes de hacer la preselección definitiva para el Clásico. Fui a coger la pelota y le di con el pie al chamaco (Víctor Víctor). En eso él pidió tiempo y salió mandao diciéndome cosas: ´oye tú métete conmigo…´. El estadio estaba lleno y el tipo se paraba, apuntaba para donde yo estaba y le decía a la gente como que yo no iba a ir a ningún lado (hace gestos de guillotina).

“El chequeador me dijo, lo mejor que hiciste fue no contestarle porque iba a ser peor para ti y yo le dije ´se ve bien que todo el mundo le tiene miedo´, porque el árbitro de primera tenía que botarlo, estaba ahí cerca y escuchó todas las barbaridades que el otro me dijo y no hizo nada.

“Hasta ese incidente con su hijo fue como algo cuadra´o”.

Para finalizar, volvamos al tema México ¿hay posibilidades de que Samón vuelva a estar con los Piratas?

El dueño del equipo conversó conmigo antes de venir para acá. Fue bastante claro conmigo. Me dijo que necesitaba ahora una gente que estuviera rindiendo en el campeonato, un primer bate. Me sugirió que tuviera una buena temporada, que si se hacían los ajustes debía entrar con el equipo a principios del próximo campeonato.

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Esta entrada fue publicada en Entrevistas y etiquetada beisbol, cuba, baseball, lmb, campeche, piratas, liga mexicana, Liga Mexicana de Béisbol (LMB), yordani samon. Guarda el enlace permanente.
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31 Respuestas a La experiencia es extraordinaria, Samón Matamoros
Pedro Benítez

Tiempo Muerto -

Maestro, al fin gracias a la peticion de muchos de sus lectores que residen en el extranjero el periodista Jose Alejandro ha tenido la bondad y a la vez la virilidad de pegar su articulo en su columna de JR Acuse de recibo,para que sus lectores los cubanos de a pie tambien puedan compartir su opi nion o al menos saber lo que usted escribe.Amigo Luis,a pesar de que cada vez estoy mas viejo,no dejo de asombrarme nunca de los temores que tienen nuestros dirigentes de que las personas puedan expresarse libremente o tener el acceso que decidan para obtener informacion.Liborio no puede leer su blog aonque cuente con computadora en su trabajo o en su casa.Con eso lo ponen a usted al mismo nivel de Yoani y de Regina Coyula etc ,etc,a pesar de que de todos es mas que conocido que si alguien no ha disparado un chicharo jamas contra el modo de pensar de los gobernantes ese ha sido usted.No se por que esta absurda prohibicion me trae a la mente los placas de los Beatles,y los cassetes de Feliciano y Julio Iglesias.Por ultimo profesor, no cometa ni por asomo la idea de ponerse a favor de Victor Mesa, no vaya a ser que sus vecinos le armen un acto de repudio y lo tenga que rescatar la policia de sus garras como le sucede a esas viejas vestidas de blamco.

El Duende. -

Ese fue el texto del SMS que César Valdés (junto con Omar Lucero, nuestro mejor umpire en activo) me hizo llegar hace unas horas. Y lo admito: inicialmente pensé que se trataba de una idea derivada de la cólera o el abatimiento.

Sin embargo, al conversar vía telefónica, César me convenció de que lo había pensado detenidamente:

“Han sido 22 años fuera de la casa y lejos de la familia – me dijo-, esforzándome por hacer mi trabajo con rigor y calidad. Y ahora resulta que tengo que soportar que se diga que el arbitraje decidió la Serie Nacional”.

Sus palabras chorreaban decepción, mezclada con una rabia contenida que asomaba a ratos en alguna frase. En el deporte insignia del país, César Valdés ha sido el árbitro insignia de los últimos años. Y, desafortunadamente, acaba de explotar…

“Hay cosas que no se pueden echar por tierra, ni permitírselas a nadie. Vale más decir adiós y con honores, que aguantarlas. Porque el arbitraje estuvo mal en los play off, pero hay muchas otras cosas de las que no se habla y también le están haciendo daño a la pelota”.

Según él -que no es hombre de andar masticando demasiado las palabras-, en Cuba estamos llenos de talento beisbolero, pero no hay sistematicidad en el trabajo ni atención a los atletas, técnicos y árbitros. “Y ahora resulta que nos han caído arriba en todas partes, como si nosotros fuéramos el mal de fondo. Es injusto y muy molesto”.

Con un Clásico, par de Juegos Olímpicos y cinco Mundiales a la espalda, el corpulento umpire de San Juan de los Yeras se retira con solo 47 años cumplidos. Está dolido, y no le interesa ocultarlo. Ni siquiera lo piensa dos veces cuando le sugiero reconsiderar la decisión…

“Nada de eso. Estoy listo para ayudar en lo que me necesiten, pero hay que saber irse antes y no después”.
(Fin de la cita)

Señor Sexto, esto fue todo lo que encontré expresado por Cesar Valdez sobre su decisión de presentar la renuncia, ni una palabra de disgusto por las ofensas del público, él se enfoca en la descalificación mediática que jusgo las decisiones polémicas por las tomas de más de cuatro cámaras en el terreno donde se mostraban una y otra vez las jugadas, que en varias ocasiones hasta las cámaras y tomas se contradecían entre sí, también la falta de autoridad de la comisión Nacional de Beisbol, ambos partes parcializadas a favor de Víctor Mesa, a quien pretendían limpiar su imagen con una victoria en la serie nacional, jamás en la historia del beisbol se llegó al extremo de que nuestros medios de comunicación y las autoridades deportivas descalificaran por jugadas polémicas el éxito merecido de una de las provincias participantes en estas lides, y se descalificara de esa forma al arbitraje, cuando eso ocurre, que queda entonces, acaso no sabemos que seguiremos jugando con esos mismos árbitros y que serán ellos los encargados de impartir justicias.
Dos aspectos me llaman la atención: Primero que nadie, ningún periodista, medio de comunicación o autoridades deportivas se hallan interesado sobre esta importante noticia que muestra la gravedad de la crisis del beisbol cubano y la profundiza, se acentúa después de inexplicable protagonismo e impunidad del popularmente rechazado director del equipo Cuba el insoportable Víctor Mesa, quien con su vulgaridad, prepotencia, violencia y boconería tiene aterrorizado a deportistas, árbitros, periodistas, quienes debido a sus aspiraciones u otras razones prefieren sometérsele que enfrentarlo.
Está claro, no que no desean conocer ni profundizar en las causas de esta sorprendente renuncia, lo que demuestra que conocen y/o son parte de las razones que dieron lugar que se produjera.
En segundo lugar es inexplicable para mí y sospechoso que usted al abordar el tema actué de forma poco objetiva y falto a la ética periodística, poniendo palabras y razones en boca de Cesar que nunca por el fueron pronunciada, o si lo fueron no se publicaron, pero si usted sabe su origen debía dar la fuente para poder corroborarlas.
Mientras tanto es licito que yo piense que usted intenta manipular lo expresado por el árbitro en un intento por generalizar las razones y restar importancia a las causa de descontento del calificado árbitro, claramente por el expresadas.
Para mi usted sigue apegado a su línea de guardar un equilibrio entre su apego y defensa de la línea oficial en todos los temas que trata, y su crítica de paños tibios que lo convierten ante sus lectores de tuerto en rey en la abundancia de periodistas ciegos.

Luis Úbeda -

Luisón, solo decirte que, con tu acostumbrada genialidad, invitas a una reflexión más allá que la ceñida al terreno de béisbol. Oajalá que "los copilotos de Julio Verne" sientan vergüenza de sus actos, y hombres como César Valdés no sean precisados a renunciar a lo que mejor saben hacer en sus respectivos oficios.

D.Tataglia -

Nuevamente aparece en un comentario publicado en Juventud Rebelde,el interes de un lector que se queja de que a traves de su portal cubano,no puede acceder al blog de este periodista,mientras que otros foristas bien intencionados planten al anfitrion:"Ojala que este articulo fuera publicado en Juventud Rebelde para que nuestro pueblo lo conociera y opinara"...Y yo que vivo lejos y que hace cerca de veinte anos que no visito mi pais me pregunto lo siguiente:Quienes en Cuba pueden leer y disfrutar Patria y Humanidad?.Si el senor Sexto u otra lector buen samaritano me lo puede aclarar,estare agradecido.Me cuesta pensar que los cubanos de a pie no puedan leer los valiosos articulos de este periodista que cuenta con numerosos seguidores en muchas partes donde habitamos los nietos de Liborio y a pesar de los vaivenes de esta carreta con la cual yo comparo al blog,donde unas veces se puede y otras no,la pluma de Luis sexto es siempre como brujula que apunta con sus opiniones por donde debe transitar nuestra sociedad para encontrar el camino que a veces parece perdido.

D.Barzinni -

Nuevamente este agudo periodista toma el toro por los cuernos y nos dice abiertamente lo que otros callan.Quitemosno el sombrero ante el hombre valiente que se separa del rebano de aduladores para clamar su verdad como clamo el bautista la buena nueva en medio del desierto.La nacion esta cansada,la debacle del deporte es solo la punta del iceberg.Es que acaso solo Sexto y Jose Alejandro son los unicos que advierten a gritos que el barco debe cambiar el rumbo,o de lo contrario los suenos y los logros iran a parar al fondo del oceano?.El edificio cruje a ojos vistas,pero los que toman desiciones,se empenan en ignorar la pesadilla que padece y sufre el cubano de a pie.Cada nueva medida nos trae el eco de los que son afectados:Unos se quejan de que los precios sufren en espiral continua,donde los mas afectados son los mas humildes y los jubilados.Los que tienen que pelarse deben pagar cada mes mas por su pelado,los que tienen que arreglar el auto tienen que desenbolsar lo que no tienen.La higiene se deteriora y siguen apareciendo a todo lo largo de nuestra geografia brotes de enfermedades peligrosas que no acaban de controlarse,que todo el mundo conoce ,pero nada de esto se menciona en la prensa a pesar de un recien concluido congreso de periodistas y mientras Radio Bemba transmite y transmite en nuestros medios reina igual que siempre la paz de los sepulcros.

Daniel Noa -

Una vez más...Maestro, hace ustred gala de buen tino y oportunidad en su oficio...Digamos todos al amigo César que recuerde aquella frase: Al César lo que es del César...y que vuelva a su lugar tras el home....Nosotros somos de la hornada que proclamó: ¨Con el escudo o sobre el escudo¨...

tocorolo -

La crisis moral en nuestro pais cada dia es peor, este articulo lo resume todo. El hombre nuevo del que hablo el Che todavia lo estamos esperando.

caro -

Estimado Luis:
Lo felicito por este excelente artículo y por su decisión de abrir el blog a comentarios. Brillante su frase de que "La pelota cubana sufre una crisis de autoridad, una crisis de valores y una crisis técnica." Nadie podría haberlo resumido en una frase tan corta. Considero que en efecto las apuestas ilícitas están minando el comportamiento del público en las gradas, y me pregunto cuál sería la solución de este problema ¿acaso hacerlas lícitas y organizadas? Creo que la falta de respeto de los aficionados ya es intolerable y coincide con la crisis de valores de la sociedad, y por otra parte el clan representado por Higinio Véliz y Víctor Mesa (a quienes admiro como Director de Equipo y pelotero, respectivamente) le están haciendo ya daño al béisbol cubano con su actitud grosera y su olímpica ignorancia por el sentir del pueblo. Gracias

D.Corleone -

La cosa esta color de hormiga.No es para menos,cuando una figura estelar del periodismo cubano nos afirma que la crisis que vive el beisbol es la misma crisis que vive el pais entero,cuando se reconoce que existe de manera generalizada un deterioro en los valores esenciales que engrandecen una sociedad.Esto se palpa en cada uno de los aspectos de nuestro clima social.En el plano deportivo hemos sufrido una debacle en cada una de las especialidades deportivas en que nuestros atletas han hecho presencia,siendo el colofon el ultimo campeonato mundial de atletismo,el llamado deporte rey celebrado en Moscu recientemente,donde los anemicos resultados obtenidos han hecho reflexionar a muchos hasta donde se puede retroceder y cuando sera que tocaremos fondo.La renuncia de este prestigioso profesional del arbitraje nos hace preguntarnos cuantas amarguras debe haber tenido que soportar en su desempeno para tomar una decision tan drastica,como para hacerla irrevocable.Como bien se biene apreciando, la poca cortesia,las falta de respeto,la falta de cultura,la improvisacion y hasta las actitudes violentas han sido expuestas en varias ocasiones por directores tecnicos que deberian ser los obligados a mantener una actitud ejemplar y deportiva en todo momento.La sociedad esta en crisis en su conjunto y valdria tambien la pena preguntarnos cuando gana un oficial deportivo como Cesar Valdes y si vale la pena tanto sacrificio.Pierde el deporte,pierden nuestros aficionados,pierde nuestra sociedad en general.El sistema esta en quiebra.RIP

Jose Diaz -

Muy de acuerdo con su escrito Luis Sexto, otro pelotero cubano deserto en Canada, Yozzen Cuesta Padron abandono el equipo de Ciego de Avila el miercoles y no aparece. Esta crisis que usted menciona es a todo nivel y parece no terminar. Este articulo deberia titularse "NO SE PONCHE PUEBLO DE CUBA". Mis saludos