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PATRIA Y HUMANIDAD

Luis Sexto presentó en Cienfuegos su poemario Con luz en la ventana

Luis Sexto presentó en Cienfuegos su poemario Con luz en la ventana

Por Aymara Cáceres Abreu / Foto: Justo

 Al estilo borgiano de concebir un poema como ensayo de magia, en ese acto de dar cosas que fueron suyas, Luis Sexto entregó a Cienfuegos la primicia de su segundo poemario Con luz en la ventana.Con luz en la Ventana, a cargo de la Editorial Pablo de la Torriente Brau, es fruto de la recopilación de 50 poemas escritos por Sexto que apuntan a la vida misma, en una especie de aventura intelectual en la cual -según Omar George, presentador del poemario- admite descubrir al periodista no olvidado, pero sí oculto en su oficio de poeta.La sensibilidad humana, avivada y expresada en condiciones extremas, recorre el poemario, cuya intención, a pesar del desgarre humano que subyace en él, procura ser un canto al sentimiento y a la alegría de vivir.Predicador y amante de la palabra sin el estrépito, pero con la ternura goteándole dentro, se nos revela el periodista con aciertos de poeta, aquel que haciendo uso del recurso tropológico califica de insólito desgarro, de mordida sobre la nada la búsqueda de una poética, que a todas luces desmiente el abandono de Polimnia y logra la atención de un conocedor raigal de la poesía, como Cintio Vitier.Trajo a Cienfuegos, además de su poemario, la dádiva de maestro, y en ese diálogo entre talento y oficio sale airoso, porque en él hay algo más: una vida latiendo por y para el ejercicio periodístico. Antonio Enrique, quien fuera su alumno, me decía: es uno de los últimos románticos del periodismo en Cuba.Con una humildad profesada sin artificios lega como viejo sabueso del oficio - a aquellos que empezamos y a los que ya han recorrido un buen trecho en su ejercicio- la maña de mojarse los pies para buscar el hecho y tapizarlo con el pronóstico, la interpretación, la oportuna precisión.Algunos tuvieron la desdicha, como dice él jocosamente, de contarlo entre sus maestros, otros lo conocimos mediante las páginas escritas, que es el mejor modo de conocerlo. No es afán alabador ni intento de pulir el brillo de su calzado. Su advertencia habla por sí sola. Es la expresión agradecida de un auditorio que disfrutó, aprendió y aprehendió sus enseñanzas. Sus lecciones evocaron al profesor no olvidado que tuvimos todos alguna vez, porque dejó huellas perdurables en nuestro crecimiento como seres humanos y como profesionales. Es de esos hombres que nos ayudan a ver la vida diferente, a entrelazar los acontecimientos, a encontrar en la búsqueda, el hallazgo de la sabiduría.Intuitivo, con una gracia amasada en su ascendencia española que cuajó simiente en estas tierras, no dicta máximas en el conocimiento que transmite a sus alumnos. Lo apreciamos como pez en el agua al dominar una profesión que califica como oficio de las manos, dictadas por el cerebro, pero con la adhesión del corazón. Asiente conocerla hoy un poco mejor que ayer, aunque no la asume como práctica ceñida, sino abierta al sol y las estrellas.Nos habló del periodismo literario, sus estilos, del tono y el punto de vista espacial. Nos habló de lo humano y lo divino. Floreció la anécdota, entre ellas sus grandes hallazgos como periodista, pero también sus descalabros, aquellos que un día lo hicieron dormir mal, y que hoy, cuando el tiempo ha hecho lo suyo, el prisma aliviador de la risa los devuelve. Mas, no dio recetas, pero no olvidó el signo de su tiempo. Alentó la aptitud, siempre que la secunde el esfuerzo y la constancia.Propició como lector voraz que el hálito de Carpentier, Raúl Roa, Onelio, Jorge Luis Borges y el gran Kapuscinski estuviese entre nosotros cada mañana, para arrojar luz y motivar la indagación que sedimenta la cultura.Vindica con su obra el periodismo cubano, lo asume como categoría artística y no como un cuento de caminos para con su estilo natural, ese al que nos convoca en la práctica de todos los días frente al ordenador o la primigenia agenda, develar su alma, esa que no está precisamente en sus zapatos.

(Fuente: 5 de Septiembre) 

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